Hora de volver a la senda del triunfo. El UEMC Real Valladolid Baloncesto afronta en Pisuerga una oportunidad de volver a vencer y recuperar sensaciones en la visita del Cáceres Patrimonio de la Humanidad de este sábado 19.00 horas. Un conjunto, el extremeño, en reconstrucción, con técnico nuevo y en una cita en la que volverán a ser de la partida Mike Torres y Jaime Fernández, ya recuperados de sus respectivas dolencias.
Ambos jugadores han entrenado en buenas condiciones durante la semana y estarán disponibles para un encuentro trascendental. La nota negativa del parte médico, sin embargo, la pone Iñigo Royo. El interior vitoriano cayó lesionado en San Sebastián, precisamente, en la visita del UEMC RVB al Guuk Gipuzkoa Basket y será baja de larga duración debido a una dolencia en la cabeza del peroné con afectación de los ligamentos del tobillo y de la cúpula del astrágalo.
Con se contratiempo y ante el penúltimo clasificado actualmente, el cuadro vallisoletano tratará de iniciar otra vez una nueva serie de victorias y reanudar la escalada para crecer desde octavo puesto que actualmente ostentan. El balance de los locales, de este modo, es de 11-8, mientras que los cacereños llegan a orillas del Pisuerga con un registro 5-14 y en pleno proceso de reconstrucción.
Sin Roberto Blanco en la banqueta verdinegra, el asturiano Arturo Álvarez coge las riendas de un equipo que poco o nada tendrá que ver con el Cáceres Patrimonio de la Humanidad de la ida. Quizá sí a nivel de nombres, pero no en cuanto al estilo propuesto. La dirección del equipo, eso sí, la sigue llevando el veteranísimo e ilustre Dani Rodríguez, una institución en la LEB Oro, junto con Hansel Atencia y el jovencísimo Pablo Rodrigo, complementando el puesto con perfiles distintos.
Los puntos desde el perímetro los pone el ‘vallisoletano’ Greg Gantt, icono del Real Valladolid Baloncesto y una de las figuras históricas y carismáticas de la historia reciente del Club. El escolta floridano es una de las principales amenazas de la línea exterior, donde también destacan Gael Bonilla, Pablo Sánchez, Lucas Sigismonti y Pau Carreño. Todos ellos con la juventud y el talento por bandera.
Cerca del aro Arturo Álvarez cuenta con piezas más experimentadas, más curtidas, como son el ala-pívot Remu Raitanen, el ‘cinco’ Vaidas Cepukaitis o Ashley Hamilton, otro jugador con galones en la categoría. El brasileñe André Dikembe y el nacional Daniel García-Casarrubios cierran un juego interior en el que no estará Juanjo Santana, lesionado, y hombre clave en la pintura para los extremeños.
En el encuentro de ida, precisamente, el UEMC Real Valladolid Baloncesto sumó su histórica octava victoria consecutiva, el récord de la entidad pucelana. Por aquel entonces, los de Paco García batieron la marca y pusieron el broche a una serie inmaculada en la que destacó un imperial Devin Schmidt, que anotó 36 puntos y decidió en los minutos calientes con siete seguidos.
Pero nada tiene que ver ese triunfo con la cita de este sábado para el UEMC Real Valladolid Baloncesto, aunque los vallisoletanos llegan bien a la cita, en palabras del propio técnico en rueda de prensa. “Yo creo que no hay dudas, yo creo que el equipo está bien y es sabedor de que, a medida que recuperemos jugadores importantes como son la entrada de Mike o Jaime, el nivel del entrenamiento sube. Y subiendo el nivel del entreno, pues va a subir el nivel de rendimiento, eso es el ABC del deporte profesional. La ilusión es la de volver a iniciar una nueva racha de triunfos. En Cáceres pusimos broche a un récord en el club que eran ocho victorias seguidas y desde ese partido del 15 de diciembre en Cáceres, sólo hemos sido capaces de ganar un partido (Fuenlabrada), con lo cual tenemos la ilusión de que sea el inicio, Cáceres, de lo que fue el final. Es espectacular momento para empezar otra vez una buena serie de victorias”.
El encuentro de este sábado a las 19.00 horas en el Polideportivo Pisuerga se retransmitirá a través de la aplicación y la página web de LaLiga+. Los árbitros serán Morales García-Alcaide, Domingo Vilalta y Aranzana García.