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Real Valladolid Simancas

Que la estructura siga creciendo

Rubén Beltrán, inmensamente feliz, pone en valor el cómo ha afrontado el Real Valladolid Simancas estos dos meses de competición al filo de la navaja, y destaca todos los ascensos de la sección femenina como fortaleza de proyecto

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Un Rubén Beltrán inmensamente feliz tras lograr el ascenso a Tercera RFEF puso en valor el crecimiento de la estructura femenina blanquivioleta, los éxitos de los equipos del Real Valladolid Simancas, y la fortaleza que ha demostrado su plantilla viviendo al filo los últimos dos meses de competición. El primer equipo femenino ha logrado el objetivo después de superar al CD Parquesol B en un partido complicado, sumando 12 triunfos consecutivos que han supuesto lograr el título en Gonalpi solo un punto por encima del segundo clasificado, lo que habla de la dureza de esta competición.

"Ha sido duro, hemos sufrido mucho, hemos conseguido reponernos del partido flojillo de hoy y hemos conseguido los tres puntos" arrancó, emocionado, tras el pitido final del último partido de la temporada, el que afirmaba que las de Pucela eran campeonas y obtenían plaza para categoría nacional. "Muy merecido, con mucha competencia del CD San José, los números que hemos tenido y el esfuerzo de las chicas ha sido espectacular" continuó el entrenador, que apuntó que "hemos conseguido convencer a cada una de ellas que sin la compañera no conseguíamos nada por mucho que fuera buena una misma, hay una calidad de jugadoras muy buena, hemos focalizado ese trabajo, las hemos convencido y sin ellas no habríamos hecho nada".

El técnico resaltó la magnífica racha del equipo y el precioso pulso ante el cuadro soriano por esa primera plaza. "Ha habido momentos en los que ha costado, esa continuidad todo un tiempo es difícil, pero dentro de lo negativo estar al filo de la navaja desde hace dos meses, que no podíamos fallar, ha permitido al equipo crecer de una manera muy rápida para afrontar cada partido como una final, y a la vista está que llevamos 12 partidos seguidos ganando y acabamos un punto por encima del segundo". El ascenso es el premio a una temporada muy sufrida y espectacular al mismo tiempo, con las vallisoletanas invictas en los 28 partidos del curso, con 23 victorias y cinco empates, y unos datos goleadores apabullantes: 141 a favor y únicamente nueve en contra.

Ahora, eso sí, toca pensar en lo que viene ya que llegar a categoría nacional, al cuarto escalón del fútbol femenino, supone "un salto importante de categoría, la exigencia que va a haber va a ser muy grande". Un avance no solo para el primer equipo sino para todo el Real Valladolid femenino, sobre el que puso el foco Rubén Beltrán para concluir: "Es un salto importante para toda la estructura, con el ascenso del B que me da mucha alegría, no quería chafar su gran temporada, un equipo que en su primer año tiene unos números arrolladores y un proyecto de futuro con gente muy joven que apunta muy alto; y con el ascenso de categorías inferiores, quiere decir que la cosa va muy bien y hay que seguir trabajando el día a día como se está haciendo".