El Real Valladolid salió derrotado (2-0) en su visita al Carlos Belmonte ante un Albacete Balompié con más pegada. “El partido no se dio. Son momentos de confianza, de conocimiento… Suena como excusa, pero es una realidad. Vamos a trabajar y a salir adelante buscando los temas para mejorar”, señaló Paulo Pezzolano tras su último partido de sanción, en otro día en el que Camilo Speranza dirigió de nuevo al equipo.
El técnico lamentó el primer gol encajado, ya que después tuvieron que ir contracorriente: “Pecamos del balón parado en contra. Quisimos arreglar de atrás para adelante. Con bola nos faltó ser agresivos”. En ese sentido, volvió a hacer autocrítica y abogó por “ir partido a partido”, dadas las circunstancias. “Si queremos ascender tenemos que mejorar dentro del campo y ganar el próximo partido. Mejorar la imagen, tener más ocasiones, cuidar el balón en contra… Se nos complicó el partido en ese balón parado”, explicó.
Respecto al planteamiento utilizado en la noche de este viernes, Pezzolano comentó que “durante las presiones había espacios en las espaldas”, por lo que trató de buscar una solución: “Estamos recuperando a Kenedy e intentando sacar lo mejor de cada uno de ellos. En el medio queríamos gente con buen trato de balón y profundidad por fuera. Después buscamos con Marcos André y no se dio tampoco”.
Tras un comienzo de curso complicado, el entrenador blanquivioleta señaló que, tras la pasada campaña, están “rearmando el equipo”. “Queremos ascender, hoy se cierra el periodo de fichajes y tenemos que marcar los objetivos, qué somos como equipo. Cuando estos jugadores agarren ritmo y confianza se va a ver otro tipo de juego”, expresó.
Mientras, finalizó apuntando que se encuentran “esperando a algún jugador que pueda llegar”, en referencia al cierre de mercado.